16 inestimables tips aprendidos en 3 años de blogging
¿Quieres conocer mi experiencia y tips de tres años de blogging? ¡Aquí los tienes!

El blogging mola.
Vicia.
El blogging es una fuente sin fin de aprendizaje. Aprendes acerca de los temas tratados y, también, de un sinfín de aspectos que van desde la escritura al análisis, de la empatía a la organización, de la curiosidad a la formación. ¡Y suma y sigue!
Escribiendo este post he recordado que no es la primera vez que me apetece escribir un texto largo sobre blogging, así que lo tengo ya anotadito para mis objetivos a medio plazo con respecto a mi escritura ¿online, ebook, PDF…? ¡Veremos!
Por el momento os dejo con esta lista: 16 inestimables tips aprendidos en 3 años de blogging.
Contenidos que encontrarás en este artículo
- 1 1) Valorar mejor mis aptitudes
- 2 2) Tengo derecho a bloguear sobre lo que me apetezca
- 3 3) Mis lectores: hechos, motivación e inspiración
- 4 4) Ser un bohemio o ser un estratega ¿he ahí la cuestión?
- 5 5) La importancia de la pregunta en el blogging
- 6 6) Títulos que prometan ¡y textos que rematen!
- 7 7) Si pierdes el foco, tu post se transformará en foca
- 8 8) Si te dispersas, no borres: pregúntate si puede convertirse en post
- 9 9) El contenido es el rey… y no está hecho solo de palabras
- 10 10) Las imágenes potencian el texto, si las eliges bien, y miman tu SEO
- 11 11) Las citas célebres gustan, motivan y aportan credibilidad
- 12 12) Cada post debe tener su propio tamaño… y no pasa nada
- 13 13) El esqueleto del post para ganar en enfoque y efectividad
- 14 14) La tipografía, las negritas y la lectura escaneada
- 15 15) Las herramientas son importantes, pero… ¿casarse con con ellas?
- 16 16) (In)Formación es poder
1) Valorar mejor mis aptitudes
Escribir un blog te invita a analizar qué sucede en tu vida dentro y fuera del blogging: y es que no dejamos de ser nosotros al escribir un blog. Nuestra experiencia sirve como ejemplo. Unas veces de qué nos ha funcionado, otras de qué es mejor no hacer y otras, simplemente, fluye a través de nuestras palabras.
En ese análisis, mental y por escrito, he descubierto que si bien me estaba dedicando a escribir, en una primera etapa lo estaba haciendo con cierta timidez y con cierta sensación de intrusión. La intervención de mis Exploradores y mi análisis de esta, me ha demostrado que tengo que aprender, por supuesto, pero madera, tengo.
2) Tengo derecho a bloguear sobre lo que me apetezca
Tal cual. Eso sí, con transparencia. No me parecería ético escribir un blog sobre desarrollo profesional y personal y no indicar que no soy coach y el porqué de este blog.
A partir de ahí, mis lectores y yo, podemos crecer juntos aprendiendo distintas cosas sobre coaching y efectividad, por ejemplo.
A partir de ahí, mi personalidad coach toma su espacio, también. Y mi experiencia como escritora aficionada se amalgama con la de blogger, la de administrativa y la de apasionada por la formación bidireccional.
3) Mis lectores: hechos, motivación e inspiración

En esos momentos en los que te entran dudas acerca de tu proyecto de blogging, percatarte de que hay alguien ahí fuera dando cuenta de tu trabajo es un subidón. Y, lo más importante: si alguien lee tus textos, los comparte y te envía su feedback ya no ha lugar a dudas ¿no crees? Algo en tu forma de bloguear les lleva a “moverse” hacia tus textos e interaccionar contigo.
Además, su interacción, tal vez las analíticas que obtengas tanto en tu blog como en tus redes sociales, encuestas y demás herramientas que te ayuden a conocer un poquito mejor a tus seguidores… todo esto te aportará una info maravillosa para poder encontrar con más facilidad respuestas para la pregunta monstruo de todo blogger:
¿Y ahora de qué diablos escribo? 🙁
Lo que lleva al siguiente punto:
4) Ser un bohemio o ser un estratega ¿he ahí la cuestión?
Cuando comencé este blog, y buena parte de él (debo admitir) he ejercido de bohemia. Es decir, he escrito a salto de mata, inspirándome en mis inquietudes, mis lecturas dentro y fuera de la red. Aquello sobre lo que me apetecía escribir en cada momento.
Y es que mi objetivo principal era no tomarme como obligación bloguear y que la escritura (uno de mis mejores gestores del estrés) se convirtiera en algo cuadriculado o, peor aún, en fuente de estrés.
¿Dónde está el problema en mi caso?
El problema reside en que ya me tomaba en serio la escritura, dentro y fuera del blogging, así que el hecho de no tener un calendario de contenidos me aportaba libertad, sí, pero también estrés : “¿y de qué diablos voy a escribir esta ahoraaaaaa?” 😕
De hecho, demasiado estrés:
¡Pobrecitos mis Exploradores sin dormir pegados a sus pantallas esperando mis poooosts! Porque es lo que hacemos todos en los blogs ajenos ¿no? Ayy… qué tonterías nos dan a veces… 🙄
Sea como sea, si estás empezando en esto del blogging yo te recomiendo que no te etiquetes ni a la ligera ni en exclusiva. No hay ninguna necesidad: ¡sé ambos! ¡Sé ninguno! ¡Sé lo que te apetezca ser!
Para disfrutar de ser blogger hay que ser estratega, bandolero y curioso. No olvidar que el blog es tu reino. 😎
5) La importancia de la pregunta en el blogging
La pregunta es una de las herramientas primordiales para todo blogger. Y es que los mejores posts son respuestas a preguntas. Del mismo blogger y de sus lectores.
Una de las preguntas más importantes que puedes hacerte es ¿todos estos párrafos se ajustan al tema principal?
Otra, vital, es: ¿Estoy respondiendo a la pregunta principal?
Y la más importante, tal vez es: ¿el texto hace honor al título elegido?
Alguno de mis posts no han obtenido los resultados que pudieran. ¿No era tan buen tema? ¿Qué tenían de malo o no tan bueno los posts en cuestión?
En ocasiones lo que sucedía era que el título invitaba a una fiesta temática y, una vez dentro, el lector se encontraba con una fiesta informal. De esto hablaremos en el próximo punto, porque, por supuesto, es una de las cosas valiosas que he aprendido en 3 años de blogging.
6) Títulos que prometan ¡y textos que rematen!
El asunto del título tiene su intríngulis. Y es que es la primera toma de contacto que tienen tus lectores con tu post. Tal vez acompañado de la foto principal, de ahí la importancia de ambos.
Los expertos en blogging abogan por títulos breves y que llamen la atención.
Así que
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No hay nada más fastidioso que hacer click en un bello título… y encontrarte una rana.
¡Pero eh, todos tenemos alguna rana que otra! No es el fin del mundo…
Si le das un beso, puede convertirse en príncipe.
Y es que los posts pueden y, en muchos casos, deben actualizarse y mejorarse.
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7) Si pierdes el foco, tu post se transformará en foca
¡Y ojo con meterse con los gordis, que yo formo parte de ese club!
Es posible que te disperses, y que escribas un post que no sea efectivo por no centrarse en un tema concreto y que una información preciosa pase desapercibida. Por eso es importante el siguiente punto…
8) Si te dispersas, no borres: pregúntate si puede convertirse en post
En ocasiones te encontrarás con que el cuerpo te pide escribir sobre algo que no se ajusta al tema principal del post en el que estás trabajando.
Borrarlo y no mirar atrás es una opción.
Aunque no siempre la mejor.
Tomar ese texto y guardarlo para las vacas flacas es una mejor idea.
Esto no implica que debas publicarlo tal cual, sino que revises si puede ser de interés a tus lectores o a los lectores de algún blog amigo que te haya podido solicitar un guest post.
9) El contenido es el rey… y no está hecho solo de palabras

Cuando empecé en Por El Camino Azul, mi leit motiv eran las palabras. ¡El contenido es el rey!
Cierto.
Pero el contenido es aquello que cobija el continente.
Así que cualquier objeto que se incluya en dicho continente pasa a ser contenido. Y ojo que no estoy tratando de colártela. Solo te invito a ver los complementos multimedia como lo que son: una parte importante de tus contenidos.
¿No te gustan, relajan tu vista, aportan valor algunos de las infografías, videos, citas, clicks to tweet… que encuentras como lector en otros blogs? Y, además, pueden conseguirte más visitas para tu blog. ¿Alguien da más?
10) Las imágenes potencian el texto, si las eliges bien, y miman tu SEO
Es una buena idea crear un calendario de contenidos y agendar los distintos tipos de tareas de tu blog, trabajar por bloques de tareas.
Así podrás dedicarle tiempo justo, además de mimo y revisión a las imágenes que elijas, crees o tunees. Guardarlas con un nombre óptimo y subirlas a tu blog con un buen título, ALT y descripción favorecen tu SEO, así que deja de pensar en engorros y piensa en los lectores que puedes ganar.
11) Las citas célebres gustan, motivan y aportan credibilidad
«Todos somos muy ignorantes. Lo que ocurre es que no todos ignoramos las mismas cosas.»
Albert Einstein
Puedes buscarlas para cada post que consideres preciso. O puedes crearte tu propia base de datos con palabras clave. Yo he hecho lo segundo, y es que uso una cita célebre para dar los buenos días a los exploradores tuitero, también.
Así que tengo un Excel, con sus formulitas y demás, sobre el que os hablaré en un próximo post.
12) Cada post debe tener su propio tamaño… y no pasa nada
No pocos expertos insisten en que a Google le ponen los textos largos, con contenidos multimedia y que retengan a nuestros lectores en nuestros posts.
Siguiendo esto, algunos podrían pensar que todo post tiene que ir entorno a las 1600-2100 palabras (incluso más), incluir un video, varias fotos, citas, click to tweet (o Piopíalo, que es el que uso yo) y lo que le echen…
No obstante para darle fluidez al blog es interesante intercalar posts con distintos formatos. Es más, para ganar en diversificación, diversión… ¡vade retro monotonía!
Hay distintos tipos de temas y posts y cada uno te pide un formato distinto.
Aquí recomendaría no olvidarse de realizarse las preguntas como estas:
¿estos párrafos tienen que estar en este post (y en este orden)?
¿este contenido extra (link, foto, infografía, foto, tabla…) aporta valor, utilidad, suma?
¿este post es un todo, o puede dividirse en dos posts (o más) completos? Ojo aquí a que no te responda tu sofá en vez de tu ingenio, y termines por partir posts y dejarlos escuálidos y hambrientos de información. No me mires así… ¡se han dado casos!
13) El esqueleto del post para ganar en enfoque y efectividad
Escribir a salto de mata a veces nos lleva a escribir y editar a lo bestia. Esto puede incidir negativamente en el resultado, salvo que seas un crack de trabajar bajo presión.
Yo trabajo bien bajo presión. De hecho, gran parte de mi vida he tenido la impresión de que bajo presión todo me salía más fluido, rápido.
Entiendo ahora que la falta de tiempo me obligaba a centrarme en lo importante y no entretenerme en lo accesorio. Y para eso no hace falta tragar con la presión ¿no crees?
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14) La tipografía, las negritas y la lectura escaneada
«Tomé un curso de lectura rápida y fui capaz de leerme ‘Guerra y paz’ en veinte minutos. Creo que decía algo de Rusia.»
Woody Allen
Este es, de momento, uno de mis talones de Aquiles.
La tipografía (tipo de letra elegida) y las negritas, extensible también a subrayados, cursivas y demás efectos de texto son herramientas utilísimas para mostrar la info a quien recae en nuestros posts.
Más que para mostrar, para resaltar.
En plan ¡eh, que he escrito sobre esto, que te interesa, no te vayas sin leerlo!
Claro que no todos los internautas estarán interesados en todo lo que a ti te dé por resaltar o escribir, pero algunos sí. Y ya que han venido ¿por qué no facilitarles la tarea de leer tus posts?
El asunto es el siguiente: dependiendo de nuestro cansancio, de lo que nos guste leer, de la credibilidad o feeling que nos despierte un blogger… leemos de distinta forma.
En ocasiones, de forma ávida….
En la mayoría de nuestras lecturas, practicamos la lectura escaneada, incluso sin darnos cuenta.
De ahí la importancia de aprovechar para que en ese escaneo, los ojos de los lectores se posen en palabras que puedan despertarle interés y no en las que sea que en su libre albedrío su cerebro elija.
¿Qué subrayar y qué no?
Yo cuando empiezo a subrayar, me embalo. Horroroso. Creo que tiene que ver con mi curiosidad y mis ganas de aprender, que me parecen importantes tantas cosas, que las marcaría todas en negrita.
¿Y qué sucede con el exceso de negrita?
Que pierde su utilidad. Se convierte en una masa negruzca. O del color que sean tus negritas. Algunos de mis posts antiguos eran una masa negruzca o azulada. De hecho, creo que alguno continúa siéndolo tras revisarlo. XXD
¿Qué hago yo ahora?
Pongo en negrita las palabras clave y luego otras de apoyo para ayudar a que cobren sentido y enganchen a los lectores ocasionales o a los Exploradores, como me gusta llamar a mis seguidores.
Estoy en ello. Ya sabes, modo automejora ON.
15) Las herramientas son importantes, pero… ¿casarse con con ellas?
Empecé en Blogger, pruebas, errores. Probé con WordPress, me mudé de plataforma. Y, de ahí en adelante ha habido una retahíla de plantillas, plugins, webapps, apps sobre blogging, redes sociales y analítica que he probado que no está mal. Algunos permanecen en mi día a día, otros están ahí… y otros pasaron a la historia.
16) (In)Formación es poder
Me voy a poner un poco cortazariana en este apartado, si me permites, creando un apartado “dos por uno” mediante este divertido y sencillo juego de adornar una palabra con un paréntesis y convertirla de forma imaginaria en dos.
Considero que la información es, en cierto modo, formación. Y, del mismo modo que la información es poder, la formación también.
No puedo en este post dejar de hablar de la (in)formación que disfruto a diario de la mano de grandes del blogging como Frank Scipion y Maïder Tomasena, por ejemplo.
Ni tampoco puedo dejar de mencionar el aprendizaje que tiene el método prueba-error, siempre y cuando seas cuidadoso, analítico y observador.
3 años de blogging, 165 artículos (con este) publicados en Por El Camino Azul y unos cuantos más en espacios amigos. No está mal para empezar…
¡Y ya está bien por hoy!
¡Muchas gracias por leerme! ¿Nos vemos en el próximo post?
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