Afronta tu primer día de trabajo con confianza y éxito ¡con estos 24 tips!
¿Quieres saber cómo afrontar tu primer día de trabajo con confianza y éxito? ¡Échale un vistazo a este post y a sus 24 tips!
Contenidos que encontrarás en este artículo
- 1 Las inseguridades en el desempleo
- 2 ¿Estaré a la altura?
- 3 Es normal que sientas cierta inseguridad
- 4 ¿No será que si te han contratado en la empresa creen que podrás apañártelas bien?
- 5 ¿Te conviene reforzar tu autoestima?
- 6 ¿Cómo puedes hacerlo?
- 7 24 tips para afrontar tu primer día de trabajo con confianza y éxito
- 8 Vídeo Relacionado: consejos para afrontar el primer día… y para acoger a nuevos compañeros
Las inseguridades en el desempleo
El desempleo es una de las circunstancias vitales que más inseguridades nos provoca o incrementa. Y es que no son pocos los aspectos que se ven afectados por el hecho de no tener empleo:
- Emocionales
- Económicos
- Laborales
- Profesionales
- Familiares
- Sociales
Todo esto conlleva que tus vivencias cuando no tienes trabajo sean un tanto más costosas de lo que hubieran sido, de permanecer en activo y con ingresos regulares.
Incluso aunque te mantengas laborioso y al tanto (como ha sido mi caso debido a mis actividades altruistas en la iniciativa de orientación laboral Parejas Orientadoras o en este mismo espacio) el hecho de afrontar el primer día de trabajo te despierta un nerviosismo más allá de lo cotidiano y no puedes evitar preguntarte
¿Estaré a la altura?
El trabajo ayuda siempre, puesto que trabajar no es realizar lo que uno imaginaba, sino descubrir lo que uno tiene dentro. Boris Pasternak
Y bueno, no sé tú, pero cuando mides 1,60 m. como yo, eso de estar a la altura es un tanto complejo ;).
Tener una estatura tímida (para algunos estándar) tiene sus cosas buenas y sus cosas malas. Sentir que no estás a la altura ya es otra cosa… Es mucho más difícil encontrarle el lado positivo.
Salvo que…
Salvo que tengas la suerte de ser una persona de estas que no se conforman con la primera idea que les viene en la cabeza. En cuyo caso, te saldrá con facilidad eso de cuestionarte
¿Qué tiene de verdad este pensamiento, esta pregunta que acabo de hacerme?
¿Qué necesidad tengo de pensar así, sobre esto y ahora?
Es normal que sientas cierta inseguridad
Al fin y al cabo, sales de lo que está siendo tu “normalidad”, lo que en psicología y coaching se llama tu “zona de confort”.
¿Y qué diantres es esto de la zona de confort?
La zona de confort es ese “espacio vital” que ya tienes por mano, aunque no te termine de gustar… o te haga sentir fatal.
Llevas un tiempo en él y ya te “has hecho a lo que hay”, por eso se entiende que te “has acomodado” a encontrarte en esa situación pese a tu evidente incomodidad.
Ya tenías dominado esto de reciclarte, buscar empleo, trabajar tu networking… ¡y ahora toca volver al tajo, pasar el período de prueba y quién sabe qué más!
¿Qué tal serán tus compañeros? ¿Tendrás un líder o un jefe? ¿Tus conocimientos estarán lo suficientemente al día para el puesto?
Sea cual sea la respuesta a estas preguntas y cuantas más pueda soltarte a porrillo tu cerebro, te diré que tanto da.
¡Cómo que tanto da!
Sí, tanto da porque:
¿No será que si te han contratado en la empresa creen que podrás apañártelas bien?
Y si ellos que justo acaban de conocerte creen que puedes desarrollar tus tareas, convivir con tus compañeros y jefe, clientes… ¿no será que, verdaderamente, puedes con ello?
Tengo que admitir que cuando me llamaron de mi actual trabajo (empecé cubriendo una baja por enfermedad y ahora estoy cubriendo las vacaciones de esta misma persona) tuve una enorme alegría… seguida de un sobresalto. ¿Requerirían unos conocimientos más específicos para cubrir el puesto? ¿Cómo llevaría eso de trabajar más de siete horas seguidas?
Sí, estaba un poco nerviosita. Y empezaba a desvariar un poquito, a decir verdad. Sobre todo con esto de trabajar siete horas seguidas frente un ordenador.
[Aquí viene cuando mi pareja se troncha al recordar la de horas que me he tirado frente a la pantalla por temas del blog (peleándome con las diferentes plantillas, escribiendo posts, ideando el crecimiento del proyecto de Por El Camino Azul…), Parejas Orientadoras, formándome, practicando la escritura creativa o lo que se terciara].
¡Pero cómo no iba a aguantar 7 horas si soy de esas personas que se concentran y ni hambre tienen!
¿Te conviene reforzar tu autoestima?
¡Sí!
Y tú dirás, si no sabes cómo estoy…
Pues no, no sé tu caso concreto. Sin embargo, mi opinión es que (especialmente cuando te encuentras en desempleo) difícilmente está de más reforzar tu autoestima un poquito aquí y allí, de tanto en tanto.
¿Cómo puedes hacerlo?
Son muchas las cosas que pueden ayudarte en tu día a día para reforzar tu autoestima. De hecho, te recomiendo que tengas una cita contigo mismo de tanto en tanto para darle un brillito a tu autoestima, la imagen que tienes de ti mismo y de tu relación con los demás.
Para no ponernos técnicos ni hablarte en plan libro, te contaré qué hice yo. Me funcionó a las mil maravillas, tengo que decirte.
Mi improvisación para reforzar mi autoestima al empezar un nuevo empleo
Me dije a mí misma:
“¡Si ya has logrado muchas cosas en tu vida ¿o no te acuerdas?”
En esos días estaba preparando un nuevo cuaderno para llevar mi Bullet Journal.
¿Y qué es eso? Un bullet journal es un cuaderno en el que tú personalizas todo el tipo de escritura y planificación que puede exponenciar tus ilusiones, sueños, tu día a día… Si estás interesado en este tema, te recomiendo este post de Hypertextual sobre Bullet Journal.
Pues bien, como el uso del Bullet Journal (o Bujo) me ha ido estupendamente para impulsar el uso de mi tiempo, mi autoestima y sueños, estaba pensando en cómo personalizarlo un poco más.
Ojo, que tengo una forma muy mía de usar esta excelente herramienta: servidora usa el sistema Bujo junto con GTD (Getting Things Done, aquí tienes otro post interesante de Jeroen Sangers sobre GTD) y la filosofía de 7 hábitos de personas altamente efectiva de Stephen Covey, sobre el que podrás saber más en este artículo de Wikipedia.
¿Para qué quedarme con un sistema, si puedo personalizarlo más a mi gusto e intereses?
Sea como fuere, me di cuenta que ese era un momento espléndido para añadir un apartado nuevo en el bullet journal:
Mis logros 2016
La recompensa del trabajo bien hecho es la oportunidad de hacer más trabajo bien hecho. Jonas Edward Salk
Y es que ya en el pasado me di cuenta de lo útil y motivador que es refrescarte la memoria en cuanto a todo aquello que has logrado. ¡Y fui a tiro fijo!
Algunas cosas parecen sencillísimas, algunos podrían considerar que no tienen demasiado mérito pero ¿consigue realizarlas todo el mundo?
Pues no. Siempre hay alguien a quien le cuesta un poquito más.
Así que pequeño o grande, todos los resultados positivos valen un mundo en tu listado de logros. Especialmente cuando se asoman tus inseguridades por la puertecita.
Entre las cosas que anoté (me salió una lista bastante larga ;)) se encuentran:
- Bajar de peso
- Tomar decisiones y ajustarme a ellas
- Conocerme mejor
- Planear menos, actuar más
- Crear un sistema de organización útil y sencillo
Como ves, la lista es muy personal y es que este 2016 para mí ha sido un año de desear cambios y recordar que puedo llevarlos a cabo.
Viéndolo ahora, tal vez sería mejor tomar esta lista, entrar en detalles y cifras y adornarla con alguna foto.
Sea como sea, esta lista me despertó las ganas de crear la siguiente:
Agradecimientos 2016
Y en ella añadí todas aquellas cosas por las que me siento agradecida, entre ellas:
- El apoyo de mis seres queridos
- Reconocimiento de mi trabajo en este espacio y Parejas Orientadoras
Y curiosamente, una buena parte de la lista está ocupada por mis capacidades y competencias. Entre ellas:
- Creatividad
- Resiliencia
- Proactividad
- Valentía
¡Pero qué a gusto me he quedado al ver que escribí que me sentía agradecida por esta última!
Pues sí: me siento muy agradecida por mi valentía, por tenerla, usarla y recordar que la tengo. ¿Por qué no? ¡Es mi lista!
Te animo a que crees listas de logros y agradecimientos (no solo de 2016) además de cualquier otro tipo de reflexión que te ayude a equilibrar la balanza hacia una visión de ti mismo que te refleje mucho mejor. ¡Ah, y no dejes de contármela, tal vez me inspires para mi Bujo!
Y yendo ya al meollo del post:
24 tips para afrontar tu primer día de trabajo con confianza y éxito
- Realiza actividades y acciones desestresantes y relajantes
- Reorganiza tu rutina a tu nuevo horario
- Detecta qué actividades es preciso delegar… o devolver a su responsable
- Haz inventario de tus logros personales y profesionales
- Investiga a tu nueva empresa: a qué se dedica, cuál es su misión…
- Si puedes, conoce el organigrama de tu nueva empresa: quién trabaja en tu departamento, qué departamentos existen…
- Desayuna bien: nútrete, tómate algo que te despeje y alimenta tu cerebro
- Busca varias rutas alternativas, especialmente si llevas tiempo sin conducir (este lo aprendí un poco a las malas ;))
- Averigua el mayor número de detalles de tu puesto de trabajo: con quién tienes que interactuar, qué se espera de tu puesto, qué esperan de ti…
- Reflexiona sobre qué cosas pueden ponerte nervioso el primer día y piensa qué puedes hacer para neutralizar esos nervios
- Si tus puntos débiles siguen apareciendo en tu pensamiento, piensa en un primer paso para mejorarlos ¡y agéndalo en tus próximos días!
- Recuerda que eres nuevo: nadie espera milagros de un recién incorporado, menos aún el primer día.
- Ten claro que tienes derecho a equivocarte. El error forma parte de tu camino hacia el éxito
- Pregunta, pregunta, pregunta… ¡Y anota, anota, anota!
- Pon tu escucha asertiva y efectiva en marcha.
- Lleva una copia de tu CV y tus acreditaciones por si alguien te la solicita
- Sonríe: es gratis y contagioso
- Presta atención a tus compañeros, jefe, clientes… Te dará muchas pistas acerca de cómo son y cómo puedes fluir con ellos.
- Lleva contigo cuanto puedas necesitar: merienda, agua, clínex, un pequeño neceser con elementos de higiene
- ¿Te gustan los tes o cafés? Lleva contigo bolsitas, cápsulas ¿un pequeño termo?
- ¿Tienes tendencia a tener dolor de cabeza? ¡No olvides un analgésico entre tus cosas! Saber que lo llevas disminuirá las posibilidades de necesitarlo.
- Confirma tu horario y detalles básicos del puesto para aforntar los primeros días con seguridad
- Recuerda que si te han contratado, es que tienes mucho a tu favor. ¡Confía en ti!
- (Este no es mio, si no de la poetisa Barret Browning):
No valores el trabajo hasta que acabe el día y la tarea esté hecha. Elizabeth Barret Browning
Vídeo Relacionado: consejos para afrontar el primer día… y para acoger a nuevos compañeros
Te dejo con este vídeo de A Punto con la 2, en el que nos dan consejos acerca del primer día de empleo: cómo afrontarlo tú y las personas que te acojan en tu nuevo empleo.
Y tú ¿qué crees que te ayudaría a afrontar tu próximo primer día de trabajo con confianza y éxito? ¡Cuenta, cuenta!
¡Sin Spam!
Cada vez que un blogger hace spam
el vínculo con sus seguidores tiembla.
Puedes indicarme qué tipo de información no quieres que te envíe.